Sin duda preferimos que Papá Noel siga fiel a su mágico trineo y se olvide de otros medios de transporte. Los nueve renos que empujan cada Navidad su trineo, liderados por Rodolfo, consiguen repartir los regalos en solo 32 horas, un tiempo récord para los 510 millones de kilómetros que realizan por estas fechas. Y es que la velocidad de su trineo no tiene parangón: 10.703.437 km/h. Como para despeinarse...
Pero, nos planteamos esta duda. ¿Qué pasaría si Papá Noel decidiera probar otros medios de transporte para repartir los regalos? Según un estudio realizado por el comparador de seguros Acierto.com, si Papá Noel se decantara por ir en coche tardaría unos 740 años en terminar su tarea. Además, sólo en gasolina gastaría unos 40 millones de euros.
Y todo ello sin contar con otros factores que rodean al uso del coche, como el cambio de neumáticos, por ejemplo. Si tenemos en cuenta la legalidad vigente que permite que el dibujo de la rueda tenga una profundidad mínima de 1,6 mm, Santa debería renovar los neumáticos de su coche, al menos, 10.200 veces, es decir, más de 40.500 ruedas cambiadas.
¿Qué seguro de coche debería contratar Papá Noel?
En su largo periplo con el coche alrededor del mundo, Papá Noel no debería escatimar y tendía que contratar, apunta Acierto.com, una modalidad de seguro que incluyera vehículo de sustitución. También una cobertura de asistencia de viaje sin limitaciones de kilometraje que le permitiera llegar a tiempo. Le convendría comprobar si la póliza cubre el equipaje -los regalos- en caso de accidente (sería imprescindible). Si tenemos en cuenta que necesitaría al menos 2.500 coches (si cambiase de vehículo cada 200.000 km) en su vuelta al mundo, y que el precio de un seguro a todo riesgo con franquicia para un coche familiar con espacio para el equipaje ronda los 400 euros, Papá Noel tendría que desembolsar más de 1 millón de euros solo en seguro del automóvil.
Si Papá Noel elige repartir regalos en moto o caravana…
Si Santa prefiriera ir en una moto de 500 cm3 para evitar atascos (¡a ver cómo carga con todos los paquetes!), tardaría un poco menos que en coche: 670 años. Además, ahorraría cerca de 13 millones de euros en combustible. Debería cambiar los neumáticos cada 40.000 km, pero solo serían dos. En total: 25.500 ruedas.
Si se decantara por una autocaravana para ir más cómodo y calentito, necesitaría 836 años para repartir todos los regalos. El gasto en gasolina se le dispararía: 65 millones de euros. A cambio, sí gozaría de mucho más espacio para guardar todos esos regalos que millones de niños esperan con impaciencia.
Pero, visto lo visto, desde aquí aconsejamos a Papá Noel que no se modernice y que siga fiel a su trineo y a sus rápidos renos.