Los jóvenes no eligen un coche por ser ecológico

La durabilidad, la funcionalidad y el diseño son los factores que más valoran los jóvenes españoles a la hora de escoger el vehículo que desean comprar. No obstante, se espera que las nuevas medidas del Gobierno encaminadas a fomentar la compra de automóviles menos contaminantes influyan en este segmento de la población.

Un millón de coches rebajarán su fiscalidad
Un millón de coches rebajarán su fiscalidad

Según un estudio realizado por Cetelem, banco experto en crédito al consumo, en colaboración con la Federación de Asociaciones de Concesionarios de la Automoción (FACONAUTO), el 73 por ciento de los jóvenes de nuestro país de hasta 35 años que desean comprarse un coche tienen en cuenta, al margen del precio, factores como la durabilidad, la funcionalidad y el diseño antes que el respeto al medio ambiente.La investigación no descarta, sin embargo, que esta tendencia pueda variar con la entrada en vigor de la nueva fiscalidad para los vehículos que más CO2 emiten a la atmósfera. El aspecto más valorado por los encuestados (70,4 por ciento) a la hora de elegir un automóvil es su vida útil, de manera que puedan sacarle la máxima rentabilidad económica.El segundo factor determinante en la elección de un coche es su practicidad y funcionalidad (57,5 por ciento); es decir, que tenga un bajo consumo de carburante en ciudad y carretera, que sea cómodo y que combine la amplitud de espacio interior con la facilidad de aparcamiento. El diseño y la estética también son aspectos muy valorados por los jóvenes (31,7 por ciento).En cuanto a la seguridad (frenos ABS, dirección asistida, cierre centralizado, entre otros) es un factor valorado, sobre todo, por los automovilistas de más de 45 años a la hora de ejercer una compra, mientras que, para los de menor edad, uno de los factores más determinantes es la relación calidad-precio.El estudio de Cetelem y FACONAUTO también revela que el 85 por ciento de los jóvenes acude al concesionario con la marca prácticamente decidida, de forma que el 59 por ciento visita directamente concesionarios monomarca, frente al 27 por ciento que prefiere los establecimientos multimarca.

El gobierno ha fijado cuatro tramos para establecer el tipo impositivo que pagará cada usuario de un coche. El primero es para los vehículos que emiten menos de 120 gramos de dióxido de carbono por kilómetro, para los que, a partir del uno de enero, desaparecerá el impuesto de matriculación. El segundo bloque es el formado por los coches que se sitúan entre los 120 y los 160 gramos por kilómetro, que tendrán una tasa del 4,75 por ciento. El tercer grupo integra a los automóviles que generan entre 160 y 200 gramos de CO2, que soportarán un tipo del 9,75 por ciento. El cuarto tramo, que tendrá un impuesto del 14,75 por ciento, incluye a los turismos que emiten más de 200 gramos por kilómetro. Lo último anunciado por el Ejecutivo es que el impuesto de circulación también será ‘‘verde’’.