El Gobierno francés, tranquilo tras desmentir PSA las deslocalizaciones

El ministro francés de Industria, Éric Besson, dijo hoy que PSA Peugeot Citroen le ha 'tranquilizado' al desmentir que el grupo automovilístico tenga intención de cerrar sus plantas francesas de Aulnay y Sevelnord, y la española de Madrid, y deslocalizar su actividad.

Besson, que ayer convocó al presidente de PSA, Philippe Varin, afirmó en una entrevista a la emisora de radio 'RTL' que le había 'tranquilizado', horas después de que un sindicato hiciera público un documento interno de la empresa que planteaba la clausura de esas tres factorías para producir en países de mano de obra más barata.

Según lo que le contó Varin, ese documento que se había elaborado el pasado año, era 'un escenario de trabajo y no un plan operativo', algo que entendió el ministro, dado que 'la búsqueda de la competitividad es una constante en todas las empresas'.

'Entre un escenario y una decisión operativa, hay un mundo', argumentó el titular francés de Industria, que también contó que Varin le había dado garantías sobre la continuidad de las fábricas de Aulnay y de Sevelnord en los próximos años.

Respecto a la primera, en la periferia norte de París, la carga de trabajo 'está al completo al menos hasta 2014' gracias al éxito comercial del Citroen C3 que se fabrica allí.

Sobre Sevelnord, junto a la frontera belga, su actividad también está asegurada hasta 2017 en virtud al acuerdo con Fiat para fabricar hasta ese año furgonetas en común.

Besson no hizo ninguna referencia a Madrid, que, según el documento de PSA dado a conocer por la Confederación General del Trabajo (CGT), es 'una planta antigua enclavada en un entorno urbano' que carece del procedimiento industrial de embutido.

El fabricante automovilístico aseguró ayer a Efe que 'de ninguna manera se va a cerrar Madrid', puesto que en los próximos años se va a iniciar la fabricación allí de un nuevo modelo cuya identidad no se ha dado todavía a conocer, y hay una 'evolución positiva',

Varin, en una entrevista publicada hoy por el diario 'Le Parisien', reiteró la idea de que lo divulgado por la CGT era 'un documento de trabajo realizado por los servicios del grupo sobre la situación industrial de PSA en Francia en el horizonte de 2020', y que se había elaborado hace 'más de un año' en un periodo todavía de 'crisis'.

Ese documento, que respondía a la responsabilidad de la dirección para 'reflexionar sobre todos los escenarios posibles', planteaba 'un cierto número de cuestiones', algunas de las cuales desde entonces se han quedado 'caducas'.

Preguntado sobre la deslocalización de la fabricación de los vehículos más pequeños como hacen muchos grupos del sector, el presidente del grupo francés respondió que 'es una verdadera cuestión de fondo' porque el costo del trabajo en Francia es 'un problema'.