En concreto, España es el tercer país con precios antes de impuestos más elevados para el caso de la gasolina 95, solo por detrás de Dinamarca e Italia, así como el sexto en el caso del gasóleo, por detrás de Grecia, Finlandia, Portugal, Italia y Dinamarca.
Por este motivo, el organismo considera urgente la puesta en práctica de las recomendaciones ya efectuadas en su informe de marzo de 2009. Estas consideraciones aparecen recogidas en un nuevo informe de seguimiento del sector de los combustibles de automoción.
Las conclusiones de este nuevo estudio, en el que se hace un análisis estadístico y econométrico de la actividad del sector desde 2005, no hacen sino "reforzar notablemente" las impresiones de
Así, indica que durante 2011 los precios antes de impuestos siguieron situándose por encima de la media comunitaria y de los registrados en economías de tamaño comparable a la española, lo que a su vez coincide con un "menor nivel de competencia a lo largo de la cadena de comercialización".
A nivel provincial, hay una relación directa entre la concentración de estaciones de servicio y los precios medios antes de impuestos. Por este motivo,
El organismo también ha constatado que la evolución de los márgenes de distribución a corto plazo se encuentra con "rigideces" en el momento de producirse el ajuste de los precios antes de impuesto en respuesta a las variaciones internacionales en las cotizaciones de los carburantes. Este tipo de rigidez es "difícilmente compatible" con un proceso competitivo "correcto" y puede ser un síntoma de los problemas estructurales en el comportamiento de este mercado, indica
Traslado de precios
Competencia también ha analizado si las subidas de precios en los mercados internacionales se trasladan a subidas en los surtidores a más velocidad que las bajadas de precios. El estudio ha encontrado "asimetrías" entre 2005 y 2011 en este traslado de subidas y bajadas de precios. Estas diferentes velocidades de asjuste se aprecian "de forma clara" en el caso de la gasolina 95 y de forma "débil" en el del gasóleo.
Estas asimetrías se denominan coloquialmente "fenómeno de cohetes y de plumas", en alusión a los rápido que se trasladan las subidas y lo lento que lo hacen las bajadas, y son a juicio de Competencia "un perjuicio para los consumidores finales".