Fuerte caída de las ventas en EE.UU.

Las ventas de automóviles en EE.UU. han caído en septiembre debido a la desaparición del programa de incentivos ‘Dinero por chatarra’, aunque los fabricantes esperan que el panorama mejore en los tres próximos meses.

GM cerrará 14 plantas en EE.UU.
GM cerrará 14 plantas en EE.UU.

Todos los fabricantes se refirieron al programa de incentivos CARS (conocido popularmente como "Dinero por chatarra") como uno de los principales responsables de la abrupta caída de la demanda en comparación con la registrada en julio y agosto. General Motors ha dicho a través de su vicepresidente de ventas en Estados Unidos, Mark LaNeve, que "como se esperaba, en septiembre el mercado volvió a los niveles previos a 'Dinero por chatarra', pero creemos que nuestras cuatro marcas centrales (Chevrolet, GMC, Buick y Cadillac) están bien colocadas para generar entusiasmo". Por su parte Peter Fong, presidente de la marca Chrysler, ha reconocido que aunque la empresa "tuvo varios buenos resultados en septiembre, fue un ambiente de ventas difícil para el sector. A principios de mes, los bajos inventarios de modelos populares afectaron las ventas de Chrysler, Jeep y Dodge". GM también se ha referido a la debilidad de la confianza de los consumidores y los bajos niveles de inventario para justificar sus pobres resultados en septiembre. Las malas noticias se unen a la cancelación de la venta de la marca Saturn al distribuidor de automóviles Penske, anunciada de forma inesperada. General Motors ha dicho que las ventas de las cuatro marcas que la compañía va a eliminar como parte de su proceso de reestructuración, se desplomaron tras el fin del programa CARS. Las ventas de Pontiac, que desaparecerá junto con Saturn, cayeron un 63 por ciento. Las del fabricante de todoterrenos Hummer se hundieron un 82 por ciento mientras GM sigue buscando comprador. Saturn ha caído incluso más, un 84 por ciento. Y las del fabricante Saab perdieron un 73 por ciento. En contraste, la también sueca Volvo (que está en manos de Ford, que también busca comprador) ha disfrutado en septiembre de un aumento de la demanda del 16,3 por ciento tras vender 4.716 vehículos. Tras el impulso de las ventas proporcionado por CARS, y la esperada caída del mes pasado a la vista de que muchos consumidores decidieron adelantar compras previstas para septiembre, la mayoría de los fabricantes confían que el final del año será mucho mejor en términos económicos. Don Esmond, vicepresidente de operaciones del automóvil de Toyota, ha dicho que el fabricante japonés espera que la mejora de las condiciones económicas en EE.UU. se mantenga. "Esperamos que el impulso continúe para cerrar el año de forma brillante". GM también ha dicho que espera que los tres últimos meses del 2009 sean mejores que los nueve meses anteriores. "Estamos aumentando la producción del cuarto trimestre para reponer las reservas de los concesionarios y mejorar la disponibilidad de nuestros vehículos", ha afirmado LaNeve.

GM ha previsto producir 655.000 vehículos en el cuarto trimestre del año, un 20 por ciento menos que en 2008 pero un 20 por ciento más que lo producido en la región durante el tercer trimestre del 2009. "Creemos que lo que queda del 2009 seguirá siendo difícil para el mercado del automóvil estadounidense. Los mercados crediticios se han descongelado ligeramente pero siguen constreñidos y la confianza del consumidor, como vimos en septiembre, es endeble" ha dicho Fong.

Los principales fabricantes de automóviles han reportado pronunciados descensos de las ventas, a excepción de Ford que ha terminado el mes de septiembre con solo una caída de la demanda del 5 por ciento comparado con las cifras de hace un año. General Motors ha sido una de las más castigadas ya que ha vendido solo 156.673 vehículos, un 44,9 por ciento menos que en septiembre del 2008. Las pérdidas de GM superaron las del Grupo Chrysler, que en los últimos meses ha encabezado la sangría de ventas. Chrysler (formado por las marcas Chrysler, Dodge y Jeep) ha dicho que sus ventas en septiembre totalizaron 62.197 vehículos, un 42 por ciento menos que en el 2008. El segundo mayor fabricante en términos de ventas en Estados Unidos, Toyota, ha vendido 126.015 vehículos, lo que supuso una caída del 16,1 por ciento. Mientras, los otros dos principales fabricantes nipones también terminaron en números rojos el mes de septiembre. El Grupo Honda ha superado en ventas a Chrysler con 77.229 vehículos aunque ha registrado una caída del 23,3 por ciento comparado con septiembre del 2008. Y Nissan ha cerrado el mes con una demanda de 55.393 unidades, un 7 por ciento de caída.