Que levante la mano quien no haya sido diseñador de coches cuando garabateaba de pequeñito. Diseñadores somos todos. Buenos diseñadores hay pocos, y maestros del diseño, Walter de Silva y un puñado de talentos más. Durante el tiempo que dura una jornada laboral Walter de Silva ha estado con los jurados del Coche del Año, para recibir el emotivo premio "Abrazote", en recuerdo del periodista Manolo Domenech, pero le hemos robado unos minutos para ponerlo delante de cámara. Habla español con fluidez -que nadie diga que por ser italiano- tras su paso por Seat, y aunque no tiene pelos en la lengua, sus frases más instructivas acaban saliendo cuando ve que apagas el micrófono. Para estas ocasiones en las que no se sabe quién te va a escuchar, también tiene la inteligencia para crear frases como que "Alfa fue mi primer y gran amor, pero me casé con VW". Que cada uno entienda. Para recordar, de su dirección de diseño nacieron modelos como el Alfa 156, el Seat Leon, el Audi A5 o el nuevo VW Passat, a veces dando pinceladas, otras, con el dibujo entero, pero siempre liberados al mundo tras su conformidad.
La nueva vida de Walter de Silva... diseñando
Walter de Silva, abandonado su cargo como responsable de diseño en Volkswagen, seguirá viviendo en Munich por pura conciliación familiar, para no trastocar la vida de instituto de su hijo. Porque, italiano, De Silva lo es hasta la médula, y cree que el diseño servirá para dar visibilidad a Italia y hacerla avanzar. Así se explica su interés por el mundo académico, en el Politécnico de Milán. O un proyecto que debía dar sus frutos en pocos años para hacer de Italdesign una academia con los mejores estudiantes del mundo. Había dicho que a los 65 años cambiaría de vida y los sucesos en VW solo han adelantado unos meses el plan que De Silva se había diseñado para sí. Después de trabajar en un marco de respeto mutuo con Piech y luego Winterkorn, De Silva quiso dar un paso lateral para que el nuevo presidente de Volkswagen pudiese elegir su gente de confianza. Sí, la visión de De Silva es holística, incluso cuando no se trata de trazar las líneas de un coche. Igual es capaz de sintetizar la historia de una marca en una chapa, en armonía con las máquinas existentes para producirlas, que crea en VW procedimientos en los equipos de diseño para hacer fluir la creatividad, a la vez que poniéndola un estricto marco para la coherencia de cada marca. Mientras sigue como consultor en VW, se tomará un tiempo para pensar cómo orientará su vida, pero no hay mañana que no dedique todavía a plasmar con lápiz y papel esas las ideas que, imparables, le van surgiendo. Sí, un ciclo se ha cerrado, pero a este diseñador industrial la cabeza no le deja de girar. Que os guste el video. Y en la revista Autopista 2.954, los mejores momentos de esos largos minutos de "lecciones" de De Silva al director, Juan Carlos Payo.