La exposición pública al problema de los NOx, incluso en los Diesel más modernos, continúa y ahora le toca a Mercedes. La empresa estadounidense de abogados Hagens Berman Sobol Shapiro LLP ha planteado una demanda por engañar a los consumidores, por "apagar" los sistemas de limpieza de sus sistemas Bluetec cuando la temperatura exterior bajaba de los 10 grados centígrados. Según la demanda, esto conduce a unas emisiones 19 veces superiores al límite vigente en Estados Unidos y hasta 65 veces en algunos casos. Según Daimler, la demanda carece de fundamento y examinará esos valores para defenderse.
Recientemente el máximo responsable de Daimler, Dieter Zetsche había hecho declaraciones criticando la actuación de VW en sus Diesel por el daño que habría ocasionado al sector.
Según el informe realizado por la ICCT en Estados Unidos -origen del caso VW- se ha podido comprobar que sólo uno de todos los coches analizados cumplía con los límites durante un uso "normal" o "real" del coche. En el caso que afecta ahora a Mercedes, el punto de partida es un informe de los laboratorios holandeses de TNO, elaborado en junio de 2015, a instancias del ministerio de medio ambiente de Holanda. Encontraron que un Mercedes C220 BlueTec llegaba a emitir 40 veces más NOx que lo homologado. De acuerdo con la publicación alemana Spiegel, la desconexión del sistema de limpieza por debajo de 10 grados centígrados se realizaba para proteger el motor, lo que despertado respuestas irritadas de algunos grupos ecologistas, como solicitar que los Mercedes no puedan entrar a las ciudades cuando haya bajas temperaturas.
En los vehículos Mercedes no se han encontrado ningún dispositivo o software que detecte que el coche está siendo sometido a un ensayo en un banco de rodillos, como sucedía en Volkswagen, para alterar su funcionamiento para el examen de homologación. Sin embargo, dado que esta prueba oficial se realiza a temperaturas por encima de 20 grados, si el vehículo se encuentra por debajo de 10 grados, podría conocer que no está siendo "vigilado".
La posibilidad de que este tipo de desconexiones se produjera, sin citar a ningún fabricante en concreto, nos la había advertido un proveedor de sistemas de limpieza en junio pasado, señalando que algunos dejaban de inyectar el producto encargado de limpiar los gases (el conocido como Adblue) en determinadas condiciones. Con ello conseguían que el producto durase más y coincidiera su reposición con los periodos establecidos de paso por taller para las revisiones. En algunos coches el repostaje de este AdBlue, el aditivo basado en urea es sencillo, pero se da el caso de coches en los que el relleno se realiza en el propio maletero y puede resultar engorroso y con riesgo de derrame en el interior. Algunos fabricantes han comenzado a ofrecer en ciertos modelos la opción de un depósito de AdbBlue de gran capacidad para usuarios cuyo modo de utilización del coche lleve al motor a producir emisiones de NOx.
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