EL CSI de la carretera

La clave para reconstruir con éxito un accidente de tráfico es acumular la mayor cantidad de datos posible sobre el siniestro. En España, hay varias instituciones que se dedican a ello. Te contamos cómo lo hacen.

EL CSI de la carretera
EL CSI de la carretera

1. Recopilación de la información. Desde el momento en que se recibe la solicitud de realizar la reconstrucción de un accidente, se procede a recopilar toda la documentación e información disponible, es decir, el atestado realizado por la Guardia Civil de Tráfico, informes médicos de los lesionados, etc. 2. Lugar del siniestroUna vez recopilada la información citada, se acude al lugar del accidente, con el fin de tomar las mediciones adicionales precisas. Es decir, el analista, además de apoyarse en la labor efectuada por el cuerpo de atestados, debe hacer sus propias anotaciones en el lugar del siniestro. Si se trata de una institución privada, debe conseguir permiso para ello.3. Análisis de los datos. Se procesa y analiza detenidamente toda la información recogida.4. Reproducción de los hechos. Se elaboran diversas hipótesis sobre cómo ha podido suceder el siniestro. Se tendrán en cuenta las diferentes versiones que ofrezcan los implicados (para corroborar o rechazar algunas de estas hipótesis, se realizan cálculos). Supongamos que existen dos versiones contradictorias sobre cómo ocurrieron los hechos. Las dos tienen la misma credibilidad, por lo que se reconstruye por ordenador qué habría ocurrido si se hubiese producido el accidente como dicen cada una de las partes. Con el programa informático se simulan las trayectorias de los vehículos, frenadas, la colisión, los giros y arrastres. Si ninguna de las simulaciones efectuadas se aproxima a las versiones recogidas, entonces se realiza el método de ensayo y error hasta que se consigue llevar virtualmente, por ordenador, a los vehículos a a las posiciones en las que los encontró la guardia Civil de Tráfico. Se pretende conocer qué condiciones han tenido que darse para que dichos automóviles y escena del siniestro en general acaben tal y como estaban una vez producido el accidente. 5. Informe técnico. Tras los resultados obtenidos, se emiten las conclusiones del estudio por medio de un informe técnico pericial escrito, el cual puede ir acompañado de una animación realizada por ordenador. 6. Prueba pericial. En caso de que los solicitantes del informe lo estimen oportuno, éste será utilizado como prueba pericial dentro de un proceso judicial.

La fase más importante en la reconstrucción de un accidente es la de recopilación y toma de datos, ya que la información perdida a causa de todos aquellos datos que no hayan sido recogidos en su momento (si ya se ha limpiado el suelo, se han movido los coches, etc), no puede suplirse con ninguna técnica matemática o física de análisis.

Entre los datos perecederos de gran importancia para la reconstrucción del accidente, se encuentran:
—Posición en la que se encuentran los vehículos.
—Longitud y orientación de las huellas de frenada.
—Condiciones de la vía en el momento de producirse el accidente.
—Punto donde se produjo la colisión.
—Zonas donde se quedaron restos de infraestructura de los vehículos.

Además, existen datos complementarios que pueden aclarar mucho cómo se produjo el accidente:
—Declaraciones de los implicados. Aunque no constituyen, a priori, una prueba de que la evolución del acciente haya ocurrido realmente como ellos dicen, aportan un punto de partida a la hora de elaborar varias hipótesis sobre la posible forma de ocurrir los hechos. Posteriormente, ya se comprobará la compatibilidad de cada una de estas hipótesis con todas las evidencias físicas del accidente.
—Declaraciones de los testigos. No constituyen una fuente de información al cien por cien objetiva, pero es posible entresacar de los testigos algunos datos que puedan reforzar o corroborar determinados aspectos del accidente.
—Informes médicos. Tanto los partes de hospitalización como lo informes de rehabilitación o estabilidad lesional, sin dejar de lado historiales clínicos completos y las autopsias, suponen una importante fuente de información complementaria, ya que, a partir del análisis de las lesiones, se pueden deducir la dirección de las fuerzas que las causaron, yel movimiento de los ocupantes en el interior del vehículo.

Un trozo de un faro, una rodada… A Tony Alexander King lo delataron sus coches. Al igual que el ADN, cada pieza de un vehículo dice mucho sobre su propietario. Hemos hablado con investigadores privados, guardias civiles, forenses, aseguradoras… Los CSI españoles nos han puesto sobre la pista.

Descubre cómo se rastrea un coche.