Según esta investigación realizada entre profesores de autoescuela, los conductores jóvenes tienen el doble de posibilidades de verse implicados en accidentes que ningún otro grupo de edades y entre las principales causas, la falta de consciencia concentra el 77 % de los casos.
El resto de las causas identificadas por el estudio son el consumo de drogas y alcohol (70 %), la distracción por los teléfonos móviles (59 %), la falta de experiencia (52 %), los delirios de inmortalidad (42 %) y la idealización por parte de la cultura popular de la conducción temeraria (41 %).
Las distracciones causadas por el consumo de drogas y alcohol son mucho peor percibidas en España que en la UE, de forma que el 70 % de los profesores creen que su consumo provoca una conducción temeraria, comparado con el 49 % de la media del resto de Europa.
Por otra parte, la incidencia y la percepción de estos factores varían en todo el continente, ya que los instructores franceses perciben el consumo de drogas y alcohol como la principal causa de la conducción temeraria (85 %), mientras que en Polonia los instructores dicen que la presión de sus colegas es la mayor causa de la conducción peligrosa entre los jóvenes (73 %).
El Programa de Prevención de Riesgos Viales en Jóvenes, que en 2013 por segundo año han desarrollado Goodyear y el RACE por toda España, hace especial hincapié en la concienciación de los jóvenes en los dos primeros factores de riesgo detectados en España.
Entre los talleres que componen el programa, uno de los más destacados es el simulador de vuelco que muestra a los jóvenes las posibles consecuencias que puede tener no llevar el cinturón de seguridad abrochado en caso de vuelco.
Por otro lado, los simuladores de conducción les permiten percibir los efectos negativos que la ingesta de drogas y alcohol puede tener en la conducción.
Dos tercios (65 %) de los instructores españoles creen que los jóvenes conductores de hoy en día (entre 17 y 25 años) necesitan más formación respecto a la seguridad en carretera, ya que se presentan más distracciones que nunca tanto en la carretera como dentro del vehículo.
Un número parecido de profesores (62 %) afirma que la generación actual de conductores noveles ha crecido en medio de una sociedad frenética e impaciente, lo cual ha provocado que conduzcan de forma más peligrosa que las generaciones precedentes.
De forma preocupante, el 43 % de los profesores de autoescuela cree que los conductores noveles jóvenes de hoy en día no conceden ningún valor a las clases de conducir.
Es por ello que desde la Asociación Europea de Autoescuelas y Goodyear se considera que la instrucción de primer nivel debe estar marcada por un constante enfoque centrado en desarrollar comportamientos de conducción seguros que ayuden a los jóvenes a enfrentarse a las distracciones y a tomarse la seguridad en la carretera con seriedad.
Segun sus redactores, este estudio muestra que se puede hacer más para inculcar la importancia del aprendizaje y la práctica entre los conductores jóvenes.