Cinturón en plazas traseras, asignatura pendiente

Usar el cinturón de seguridad en los asientos traseros y en los trayectos cortos son los principales comportamientos a erradicar en opinión de diferentes colectivos de automovilistas, con motivo del 50 aniversario de este sistema de seguridad, inventado en el año 1959 por el ingeniero de Volvo, Nils Bohlin.

Sólo el uno por ciento no usa el cinturón
Sólo el uno por ciento no usa el cinturón

El portavoz de la Dirección General de Tráfico (DGT), Francisco Altozano, ha señalado que los usuarios ‘siguen sin dar importancia’ al uso del cinturón cinturón de seguridad en los asientos traseros y los trayectos en zona urbana. En este sentido, recordó que en la última campaña de la DGT --realizada el pasado mes de febrero y en la que se controlaron un millón de vehículos-- se tramitaron cerca de 12.500 denuncias por no llevar cinturón.

Respecto a la situación de España en comparación con el resto de los países europeos, Altozano ha destacado que nuestro país ‘ya ha alcanzado niveles homologables con Europa gracias a los controles y a las campañas de concienciación’. Por ello, ha destacado que el cinturón de seguridad es ‘el avance más importante en materia de seguridad vial que han incorporado los automóviles desde que existe la automoción’.

Por su parte, el director de Seguridad Vial del RACE, Tomás Santa Cecilia, ha hecho alusión ‘al poder de prescripción de uso’ del cinturón de seguridad ya que ‘si el conductor hace uso del mismo, los ocupantes lo llevan puesto en el 90 por ciento de los casos’, porcentaje que desciende al 25 por ciento en caso contrario. Santa Cecilia también ha destacado el elevado porcentaje de uso en carretera (cercano al 90 por ciento) y ha calificado el cinturón como ‘uno de los mejores sistemas que se han inventado para salvar vidas dentro del automóvil’.

En la misma línea se ha expresado el director de Automovilistas Europeos Asociados (AEA), Mario Arnaldo, al recordar que ‘aunque el cinturón de seguridad no evita accidentes, sí reduce enormemente la lesividad de las lesiones’. Respecto a los datos, Arnaldo estimó ‘difícil evaluar las vidas que ha salvado’ este sistema de sujeción, que en el año 1972 se incorporó como obligatorio en los asientos delanteros y en el año 1992 pasó a ser obligatorio en todas las plazas del automóvil.

Según la Unión Europea, el hecho de no llevar puesto el cinturón de seguridad es la segunda causa de mortalidad en accidentes de tráfico --cerca de 5.500 víctimas anuales--, por detrás del exceso de velocidad y seguido de la conducción bajo los efectos del alcohol. En España, la DGT recuerda que el 25 por ciento de los muertos en accidentes de tráfico el año pasado no tenía abrochado el cinturón de seguridad. Desde AEA recomiendan a los usuarios que, al subir a un coche, comprueben que el cinturón no esté enganchado ni arrugado, y que se ciña al cuerpo, ajustándolo en altura, talla y en la pelvis. En este sentido, RACE aconseja no utilizar pinzas para que el cinturón quede más holgado pues, en este caso, se pierde eficacia. Asimismo, es conveniente no reclinar el asiento para eliminar el denominado 'efecto submarino' en caso de frenazo brusco o accidente grave.

Tanto AEA como el Comisariado Europeo del Automóvil (CEA) señalan que la combinación del cinturón de seguridad con otros sistemas complementarios, como por ejemplo el airbag, aumenta su efectividad en un 75 por ciento para prevenir lesiones en la cabeza y en un 66 por ciento para prevenir lesiones de pecho.

Según la portavoz de CEA, Lorena Martín, ‘los fabricantes de coches hacen una labor muy buena por la seguridad vial y lo suyo es que los conductores vayan en la misma línea’. En esta línea, la presidenta de la asociación 'Stop Accidentes', Ana María Campo, ha subrayado que los usuarios que no llevan puesto el cinturón ‘se sienten desnudos’. De todos modos, ha reclamado campañas destinadas a fomentar el uso del cinturón en los asientos traseros e ha instado a la industria facilitar el acceso en este tipo de asientos.