Más biocombustibles, más hambre

El relator de Naciones Unidas, Jean Ziegler, ha manifestado que el uso de biocombustibles se ha convertido en un 'crimen contra la humanidad', en vista de los problemas que tiene actualmente el mundo con el precio de los alimentos.

Más biocombustibles, más hambre
Más biocombustibles, más hambre

Ziegler ha señalado que la quema de cientos de millones de toneladas de maíz, cereales, arroz y otros productos para producir biocombustibles era un factor primordial en las fuertes subidas de los precios de los alimentos, aunque admitió que no era el único.Otros factores aludidos por Ziegler son la política del Fondo Monetario Internacional -que obliga a muchos países del tercer mundo a tener una agricultura orientada la exportación a costa de la economía de subsistencia- y la especulación en los mercados que ayuda a disparar el precio de los alimentos.Ziegler advierte de que actualmente estamos en el umbral de una situación peligrosa en la que las revueltas por hambre pueden multiplicarse, protagonizadas por personas que luchan por su supervivencia y que temen por su vida.Respecto a los biocombustibles, sostiene que los argumentos a favor de ellos, tanto desde el punto de vista de la protección del clima como desde el estratégico, no eran absurdos, pero que han perdido validez. "Los argumentos no tienen validez ante el desastre que nos amenaza. Hoy, el uso y fomento de biocombustibles es un crimen contra la humanidad", ha insistido Ziegler.Las declaraciones de Ziegler se han producido después de que el Banco Mundial advirtiese de que el alza de los precios de los alimentos en todo el mundo generaba peligro de revueltas violentas en 33 países.En algunos países, como Haití, ya se han registrado los primeros enfrentamientos, debido a los precios de los alimentos.