Nuevo Audi Q7, 10 razones para ser el más fuerte

Segunda generación del Audi Q7. Los 10 años de espera hasta su aparición son tantos como argumentos decisivos para poner el listón casi inalcanzable a sus competidores. Repasamos las 10 razones por las que el Audi Q7 es el megaSUV diferente y referencia en estos momentos.

Juan Carlos Payo. Twitter: @PayoAutopista

Nuevo Audi Q7, 10 razones para ser el más fuerte
Nuevo Audi Q7, 10 razones para ser el más fuerte

1.- Audi Q7. Ligereza

Que un SUV como el nuevo Audi Q7, de más de 5,05 metros de longitud no supere las dos toneladas de peso con una ingente carga de equipos de seguridad, confort y dinamismo, es algo sorprendente. Mirando rivales, el BMW X5 más ligero, el sDrive25d, con una carrocería de 4,88 metros de longitud, arranca en 2.070 kilos. O si nos vamos al nuevo Volvo XC90 de 4,95 metros, su variante más ligera, la D5, pesa 2.030 kilos. El nuevo Audi Q7 3.0 TFSI pesa 1.970 kilos mientras que el Audi Q7 3.0 TDI anuncia 1.995 kilos. Esto supone una reducción de hasta 325 kilos menos que en el Audi Q7 anterior. 

2.- Audi Q7. Eficiencia y variedad mecánica

El nuevo Audi Q7 llega al mercado con dos motores V6, un Diesel 3.0 TDi con 272 CV y 5,7 l/100 de consumo medio –23 por ciento menos que en el Audi Q7 anterior- y un gasolina 3.0 TFSi con 333 CV -28 por ciento menos consumo para homologar 7,7 litros-. Más adelante, y como estandartes de la eficiencia, llegará primero, antes de final de año, un 3.0 TDi de 218 CV con un consumo de 5,4 l/100 km y 144 g/km de CO2 –el Volvo XC90 D5 anuncia 5,8 l/100 de consumo medio-. Luego, ya en el arranque de 2016, un híbrido enchufable Diesel con 373 CV y 56 km de autonomía eléctrica -1,7 l/100 de consumo medio-. También conoceremos en el Salón de Frankfurt un novedoso Audi SQ7 con motor V8 Diesel de 400 CV. Quedarán fuera de nuestro mercado una variante híbrida enchufable gasolina y un gasolina de acceso de gama  que se destinarán a mercados chino y norteamericano. 

3.- Audi Q7. Dinamismo

En el Audi Q7 2015 y en su apartado de dinamismo no sólo te deben impresionar sus 6,1 y 6,3 segundos respectivamente para hacer el 0-100 km/h  en las mecánicas TFSi 333CV y TDi 272 CV –velocidades máximas respectivas de 250 km/h y 234 km/h, respectivamente-. El nuevo cambio tiptronic de ocho relaciones te garantiza la mayor suavidad al cambiar con relaciones cortas en las marchas inferiores –deportividad- y largas en las superiores –eficiencia-. A su volante la sensación es la de conducir una berlina, sin balanceos de la carrocería, eligiendo tú si buscas confort o dinamismo máximos. 

4.- Audi Q7. Business Class

Espacio holgado en este Audi Q7 hasta para siete ocupantes –no llega a nuestro mercado con cinco asientos-, sin que la merma de calidad de vida a bordo sea progresiva cuanto más atrás estés. Lógicamente, mayor mimo en la plaza de conductor y acompañante. Calidades máximas en el Q7 de Audi, ajustes perfectos, diseño muy horizontalizado en salpicadero para aumentar la sensación visual de anchura. Asientos muy cómodos, con masaje y ventilación delante. Detrás, tres auténticas plazas con un tren de transmisión algo intrusivo. Mucha altura para las cabezas de todos los ocupantes y espacio para las rodillas según quieras, ya que se deslizan las banquetas de la segunda fila de asientos del Q7 once centímetros para que des espacio a los ocupantes de las plazas 6 y 7 o para que tengas más o menos maletero-770 litros con tercera fila oculta-. Espectacular trabajo el realizado en el nuevo Audi Q7 para lograr unas cifras de rumorosidad interior prácticamente testimoniales. Si el Audi Q7 3.0 TDI ya suena poco, su hermano 3.0 TFSi no suena nada. Espectacular trabajo de aislamiento recurriendo a nuevos materiales fonoabsorbentes y mecánicas afinadas para generar menos vibraciones al ralentí –el motor ya funciona a 850 vueltas- o a bajas revoluciones. 

5.- Audi Q7. Telemática futurista

Espectacular puesta en escena la del cuadro frontal del Audi Q7 2015 si optas por el virtual cockpit de 12,3 pulgadas manejable desde el volante –ya vista en Audi TT y R8- donde cuentavueltas y velocímetros los configuras tú en tamaño en combinación con navegador o información del ordenador de a bordo. Esta fuente de información se combina con un head-up display en color con proyección en la luneta delantera. Pero aún hay más, en la consola central tienes un espacio donde escribir con tu dedo informaciones demandadas a la hora de telefonear o introducir destinos de navegación para una segunda pantalla central de 8,3 pulgadas, hacer zoom para la pantalla central o desplazarte por una lista con búsqueda predictiva. Y por si no fuera suficiente, control por voz, Internet utilizable por los dispositivos móviles de los pasajeros mediante wifi, integración de smartphones con carga por inducción, 4G…

6.- Audi Q7. Detalles, detalles..

La gestión del cambio tiptronic utiliza los datos facilitados por el sistema de navegación, para calcular la mejor estrategia de cambio en cada tramo de la ruta jugando con orografía, límites de velocidad y densidad de tráfico –también el navegador por la noche interactúa con el sistema lumínico para buscar siempre el haz de luz óptimo-. En combinación con el asistente predictivo de eficiencia y con el control de crucero adaptativo, cambia al modo de marcha por inercia –operativo hasta una velocidad de 160 km/h– si esto va a ahorrar combustible. Además, el control de crucero adaptativo con asistente en atascos suple la necesidad de accionar volante y pedales en situaciones de congestión. Otras innovaciones destacadas para el Audi Q7 son el sistema Cross Traffic avisando de riesgos cuando desaparcamos, el exit warning cuando vamos a abrir una puerta nos avisa lumínicamente de que viene algún coche, ciclista o peatón y el asistente de remolque. Más elementos de seguridad en el nuevo Audi Q7: el Turn Assist llega a detener nuestro coche en giros a la izquierda con tráfico llegando en sentido contrario si detecta riesgo de colisión; el asistente de visión nocturna utiliza una cámara infrarroja de largo alcance que capta objetos que irradian calor, avisa acústicamente al conductor y lanza tres ráfagas a los peatones. Por último no por conocidas son menos importantes las soluciones de aparcamiento automático asociado a cámaras con visión cenital, asistente de cambio de carril. 

7.- Audi Q7. Siempre quattro

Cuando nos ponemos al volante del nuevo Audi Q7, y siempre que las condiciones de conducción sean normales, el diferencial central distribuye la potencia entre los ejes delantero y trasero en una proporción de 40:60 por ciento. En caso de que  las ruedas de un eje pierdan adherencia puede llegar a transferir hasta un máximo del 70  por ciento de la fuerza al eje delantero y un 85 por ciento al eje trasero de forma instantánea. Estos valores son más altos que en el modelo predecesor. Como complemento a la tracción quattro nos encontramos un sistema inteligente que permite el control selectivo de par en cada rueda. Si una de las ruedas motrices del interior en una curva no tiene suficiente carga, el sistema de gestión de control de par realiza una intervención mínima y precisa sobre los frenos de dicha rueda, de forma que el comportamiento del vehículo se mantiene neutro.  

8.- Audi Q7.  Drive select: el cerebro de este SUV

En el nuevo Audi Q7, el sistema de conducción dinámica Audi drive select integra hasta doce módulos, dependiendo del nivel de equipamiento. De serie se incluyen la gestión del cambio tiptronic, de la dirección asistida electromecánica, la gestión del motor, del aire acondicionado y del sonido del motor. Como opciones también puede gestionar la suspensión neumática adaptativa, la dirección a las cuatro ruedas, los faros y el control de crucero adaptativo. El sistema Audi drive select ofrece de serie seis modos de conducción: confort, auto, dynamic, individual, efficiency y offroad. En combinación con la suspensión neumática adaptativa se añade el modo allroad, mientras que el modo offroad pasa a denominarse lift/offroad, con control de altura de la carrocería. 

9.- Audi Q7. Suspensión neumática

Una unidad central de control en el Audi Q7 2015 gestiona y regula el funcionamiento de los amortiguadores de forma individual para cada rueda en cuestión de milisegundos. Además, unas válvulas internas accionadas de forma electromagnética varían el flujo del fluido hidráulico, lo que permite un margen muy amplio de configuración entre un tarado confortable y uno deportivo. La suspensión neumática puede ajustar la altura de la carrocería según sea necesario. En conducción offroad la carrocería se eleva 25 milímetros sobre el nivel estándar, hasta una velocidad de 80 km/h. En el nivel de máxima elevación, disponible hasta una velocidad de 30 km/h, se consiguen otros 35 milímetros adicionales. Para facilitar la carga en el Q7 de Audi, la carrocería puede descender 55 milímetros con sólo pulsar un botón. A 120 o 160 km/h la altura disminuye automáticamente 15 milímetros para reducir la resistencia aerodinámica y aumentar la estabilidad.  

10.- Audi Q7. Dirección a las cuatro ruedas

Otro sistema opcional para el nuevo Audi Q7 es la dirección a las cuatro ruedas. En el eje trasero se instala un motor accionado eléctricamente y dos bieletas de conexión que hacen girar las ruedas traseras unos cuantos grados en la misma dirección o en dirección contraria a las ruedas delanteras, dependiendo de la situación. A bajas velocidades, las ruedas traseras giran en dirección opuesta a las delanteras, mejorando la agilidad y disminuyendo el radio de giro hasta en un metro; entre 5 y 15 km/h el giro de las ruedas traseras puede llegar a ser de hasta cinco grados. A velocidades más altas las ruedas traseras siguen la dirección de giro de las delanteras en un ángulo de hasta 3,5 grados, lo que mejora la respuesta de la dirección y la estabilidad en maniobras evasivas.