Cuando todo apuntaba a un cerrado duelo entre Mads Ostberg y Sébastien Ogier por la cabeza, el actual campeón del Mundo de rallyes apretó a fondo en la sección vespertina y no solo desbancó a Ostberg del mando de la carrera, sino que ha concluido la jornada del viernes con 26.1 de ventaja.
Ogier arrancaba la segunda mitad del día 3.3 detrás de Ostberg y en la primera especial de la segunda vuelta, Los Mexicanos-2 (9.88 km) ya le quitaba 2.1 segundos, dejando su déficit reducido a 1.2. Pero era en el largo El Chocolate-2 (44.03 km) donde Ogier asestaba el golpe definitivo a su rival, endosándole 17.9 y arrebatándole el liderato por 16.7. Ostberg se quejaba de que los retoques efectuados en su Citroën DS3 WRC en la asistencia de mitad de la etapa empeoraban su comportamiento, haciéndolo mucho más sobrevirador. De hecho, el noruego, cedía mucho tiempo también con su compañero Meeke y con Hirvonen, lo que hacía que ambos se le acercaran también peligrosamente en la general.
Sin embargo, sería la última referencia para ambos, ya que los dos decían adiós a la carrera en la siguiente especial, Las Minas-2 (15.59 km). Mientras Hirvonen quedaba apeado por un fallo eléctrico de su Ford Fiesta WRC, Meeke volvía a cometer un error y arrancaba una rueda a su Citroën DS3 WRC, sin solución de continuidad.
En esa especial el mejor tiempo lo volvía a firmar Ogier, con Latvala a 3.1 segundos y Ostberg a 3.9. Era éste, precisamente, el trío de cabeza en la general, con Ostberg descolgado ya 20.6 segundos de Ogier y Latvala a 20.2 del noruego, que no las tenía todas consigo de cara a una segunda jornada donde Latvala ya no tendría el pesado hándicap de abrir carrera.
Los abandonos de Hirvonen y Meeke aupaban a Robert Kubica a la cuarta plaza absoluta, aunque el polaco también estaba sufriendo lo suyo en su primera participación en México. Tanto, que en la superespecial que cerraba la jornada terminaría volcando, tras golpear contra una de las contenciones de hormigón, perdiendo mucho tiempo en el lance y terminando la jornada “a la pata coja”. Tampoco lo pasaron bien en el arranquelos Hyundai. En el equipo coreano, Neuville era el mejor clasificado, pero acumulaba ya un déficit de 2:27 al final de los ocho primeros tramos.
Quedaban tres cortas especiales para el final, todas de poco más de 2 km, y en teoría no debía haber grandes sorpresas (aunque Kubica se encargara de romper la teoría con su vuelco…). Así fue en lo relativo al trío de cabeza y el orden no cambió, terminando la jornada con Ogier al mando de la carrera y Latvala con el segundo puesto de Ostberg en su punto de mira. Huele a otro doblete Volkswagen, pese a que queda muchísima tela que cortar todavía en territorio mexicano. Con Kubica penalizado con 10’ por no completar ninguna de las dos pasadas a la Superespecial, Elfyn Evans ascendió a la cuarta plaza y Martin Prokop a la quinta al final de la jornada.
Clasificación provisional después de 11 tramos:
1º S. Ogier-J. Ingrassia (Volkswagen Polo WRC), 1:46:25.3
2º M. Ostberg-J. Andersson (Citroën DS3 WRC), 26.1
3º J.M. Latvala-M. Anttila (Volkswagen Polo WRC), 42.5
4º E. Evans-D. Barritt (Ford Fiesta WRC), 2:28.7
5º M. Prokop-J.Tomanek (Ford Fiesta WRC), 3:31.1