Poco a poco van encajando las piezas del puzzle en el WRC 2014 y, tras los anuncios de Hyundai y Citroën a principios de esta semana, ahora llega el de M-Sport. La compañía de Malcolm Wilson se ha pronunciado hoy viernes por primera vez sobre sus actividades en 2014, adelantando que contará con tres coches en los 13 rallyes del certamen, con Robert Kubica, Mikko Hirvonen y Elfyn Evans a sus mandos.
No por esperado resulta de menor calibre el anuncio de Robert Kubica. El polaco confirma por un lado que seguirá compitiendo en rallyes y también que lo hará en la “primera división”, con un Ford Fiesta WRC. Kubica sigue vinculado estrechamente a la petrolera Lotos, tal vez uno de los factores decisivos a la hora de desechar la oferta de Citroën para convertirse en su piloto número uno por su manifiesta incompatibilidad con Total. A sus 29 años, el vigente campeón del Mundo de la categoría WRC2 da un paso adelante en su carrera como piloto de rallyes y se perfila como uno de los principales atractivos del campeonato, tanto por su demostrada capacidad para rodar con los mejores en determinadas condiciones, como por su fortísimo tirón mediático. Entre los pocos detalles que aún no se conocen está el nombre del copiloto de Kubica.
Mikko Hirvonen, por su parte, vuelve a la formación con la que saltó al primer plano de los rallyes y logró sus mejores resultados en el WRC. Junto a Elfyn Evans formará el equipo teóricamente inscrito en el Mundial de Constructores, aunque este último hecho está pendiente de confirmarse por parte de M-Sport, que aún negocia para cerrar un patrocinio que les permita involucrarse en dicho certamen. Lo que sí es seguro, inscritos en Constructores o no, es que Hirvonen y Evans disputarán las 13 carreras mundialistas, lo que significa que optarán a pelear en el apartado de Pilotos con todas las consecuencias.
El retorno de Hirvonen a M-Sport ha despertado una positiva reacción tanto en el seno de la formación como entre la inmensa mayoría de los fans del finlandés. No en vano, Mikko vuelve al equipo con el que consiguió 14 de las 15 victorias en WRC que adornan su palmarés y, dado que los coches actuales no experimentarán evoluciones de gran calado en 2014, nada impide pensar que Hirvonen volverá a batirse en cabeza por la victoria en más de una ocasión.
Elfyn Evans, por su parte, se convierte en la apuesta personal de Malcolm Wilson para el segundo coche, como premio a la fidelidad a la marca y el buen trabajo que el joven galés ha venido haciendo desde que ganó el Mundial Junior con un Fiesta R2 hasta el año pasado, donde su gran esfuerzo en WRC2 no se vio recompensado por un resultado destacable. Aun así, Wilson vio mucho potencial en Evans cuando el joven galés sustituyó a Nasser Al-Attiyah en Cerdeña con el Fiesta WRC, lo que terminó de convencerle de que puede hacer un buen trabajo.
