Dakar 2016: Sébastien Loeb y un 2008 DKR evolucionado, nuevas bazas de Peugeot

Después de un complicado debut en el Dakar de este año, Peugeot ha invertido todo este tiempo, sus ambiciosos medios técnicos y humanos y un esfuerzo titánico para hacer del 2008 DKR un verdadero contendiente a la victoria. Stéphane Peterhansel y Carlos Sainz tendrán un arma de gran calibre en sus manos ahora. El plan de Peugeot es tener también en sus filas a Sébastien Loeb, que se convertiría en un valioso activo de cara a la prueba sudamericana.

@fernandoalbes

Dakar 2016: Sébastien Loeb y un 2008 DKR evolucionado, nuevas bazas de Peugeot
Dakar 2016: Sébastien Loeb y un 2008 DKR evolucionado, nuevas bazas de Peugeot

Peugeot acaba de desvelar la imagen definitiva del Peugeot 2008 DKR “Evo 2”. Se trata de una versión profundamente modificada del coche con el que la firma francesa regresó el año pasado al Dakar, más largo, más ancho, más bajo y también más potente. El coche debutará oficialmente en el próximo Rallye de Marruecos, país donde Peugeot ha llevado a cabo el grueso de los tests de su última evolución, como reflejan las imágenes oficiales, con Stéphane Peterhansel y Carlos Sainz alternándose al volante. Lo que no reflejan esas imágenes es la presencia de Sébastien Loeb, que ha conducido el Peugeot 2008 DKR durante un buen número de kilómetros. El francés, precisamente, podría ser la gran atracción en el próximo Rallye de Marruecos (3-11 de octubre), ya que todo apunta a que Peugeot habría elegido esa carrera para que  debute en raids y prepare su primera participación en el Dakar. Loeb y Sainz serían los encargados, pues, de hacer debutar oficialmente en competición a la nueva máquina de la firma del león.

Se aprecia a simple vista que el Peugeot 2008 cuenta con voladizos delantero y trasero más cortos, con lo que Peugeot ha buscado una mayor versatilidad y un comportamiento más polivalente y equilibrado. El coche deberá acometer un buen número de importantes obstáculos en forma de dunas, cauces de ríos secos y pedregales plagados de rocas de gran tamaño, para los que ahora estará mejor preparado.

En materia aerodinámica, el coche también presenta evoluciones, visibles en las tomas de aire del capó delantero y el techo, ambas completamente replanteadas. El objetivo es que el apoyo aerodinámico entre los dos trenes sea ahora más equilibrado, al tiempo que se consigue también un flujo de aire más idóneo.

En materia de suspensión, el replanteamiento ha sido completo. Se trataba, eminentemente, de conseguir una mayor efectividad en un abanico más grande de terrenos y una clara ganancia en las partes más rotas. Se ha optimizado la distribución de masas y se recurre a llantas monobloque de magnesio, en las que se montarán tamibén cubiertas Michelin más ligeras. Así se gana bastante en comportamiento, tanto por la reducción de la masa no suspendida del coche como por la contención del peso total del conjunto.
El coche con el que Séphane Peterhalsel y Cyril Despres lograron el doblete en el China Silk Road Rally recientemente incorporporaba un gran número de elementos de los que monta la evolución casi definitiva destinada a debutar en Marruecos y a competir en el Dakar 2016.
Otra de las novedades estrella del coche con el que Sainz, Peterhansel, Loeb y Despres defenderán los colores de Peugeot en el Dakar radica en su motor. Se ha trabajado mucho en ese apartado y Peugeot asegura que el 3.0 V6 biturbo ha ganado tanto en potencia como en rango de utilización, cualidad especialmente importante en los trazados más tortuosos.

Para Bruno Famin, Director de Peugeot Sport, “no hemos hecho ningún gran cambio en el coche, sino una serie de pequeñas evoluciones en diferentes áreas, que esperamos que juntas aporten una mejora general. Nos hemos concentrado en áreas como la carrocería y la aerodinámica, apartados que hacen que el coche tenga una apariencia ligeramente diferente a la del del año pasado. También hemos modificado el motor y la suspensión. Los ensayos que hemos realizado hasta la fecha, al igual que nuestro reciente doblete en China indican que vamos en la buena dirección. El grado de preparación que tenemos ahora no puede compararse con el del año pasado, cuando todo era nuevo para nosotros. Está claro que nunca puedes decir que estás completamente listo para enfrentarte al Dakar, sencillamente porque nunca sabes con qué se te va a sorprender. Pero está claro que esta vez estamos mejor preparados”.
Stéphane Peterhansel y Carlos Sainz han pilotado el coche en todas las fases de su evolución y ambos coinciden en que se trata de un claro paso adelante en materia de potencia, tracción y versatilidad de pilotaje.
Según Peterhansel, “La diferencia es palpable ahora que el coche es más largo y ancho, con un centro de gravedad más bajo y una estabilidad mucho mayor. De modo que la velocidad de paso por curva ahora es mejor. Las diferencias también son apreciables en el motor, no solo más potente ahora, sino más utilizable y con más fuerza disponible en baja. Ahora casi tenemos un “problema” en cómo gestionar toda esa potencia de manera más efectiva, aunque… ¡bendito problema! Aún no hemos alcanzado el máximo de nuestro potencial, aunque los ensayos hasta la fecha han sido muy productivos”.

Para Sainzhan sido unas buenas pruebas y el coche ha funcionado realmente bien. Su potencial es mucho, mucho mayor del que tenía el año pasado a estas alturas y la fiabilidad ha sido importante también. Hemos cambiado bastantes cosas en muchas áreas clave, de modo que podemos decir que se trata de un coche completamente nuevo comparado con el del año pasado. Soy optimista”.

Con respecto a Sébastien Loeb, ni Peugeot ni él se han pronunciado hasta la fecha sobre su implicación en el proyecto, aunque Autopista puede confirmar que el francés ha conducido el coche en Marruecos la semana pasada durante un buen número de kilómetros. Una de las cuestiones que rodeaban el desembarco del piloto francés en raids era la necesidad de “emparejarle” con un copiloto de primer nivel, condición indispensable para hacer un buen papel en una carrera como el Dakar. Se especuló en su día con algunos nombres, pero el hecho de que los navegantes más experimentados estén fuera del mercado y bajo contrato con otros pilotos parece haber hecho cambiar de estrategia a Loeb y Peugeot en ese campo y no solo se comenzará un periodo de intensa formación en materia de pilotaje, sino también en lo que atañe a la navegación. De momento, en Marruecos Loeb probó junto a Daniel Elena, su “pareja” habitual en rallyes. Elena contó con la ayuda de Lucas Cruz, copiloto de Carlos Sainz, y también con la de otro experimentado navegante, Alain Guéhennec (acompañante de Alain Ambrosino a finales de los 80, en la épolca gloriosa de Peugeot en raids). Ambos aportaron su experiencia en la especialidad para que Loeb y Elena conocieran más detalles de lo que les esperaría por delante. A falta de confirmación en cuestión de horas, como máximo pocos días, Loeb y Elena podrían ser el gran atractivo en el Rallye de Marruecos (3-11 octubre), la carrera que cierra la Copa del Mundo de Rallyes TT, porque el plan de Peugeot es que ambos comiencen a rodarse allí, antes de confirmar nada de cara al próximo Dakar. La organización del Rallye de Marruecos aún no ha hecho pública la lista oficial de inscritos en su carrera, aunque el plazo de inscripción se cerró el pasado día 17 de septiembre. Lo dicho: cuestión de poco tiempo.