— Para deportistas. Hay que ser más bien pequeño, delgado, y desde luego estar en forma para pilotar un F3. Me sigo riendo cuando alguno me dice eso de que los pilotos van sentados y no puede ser tan duro... pruébalo y luego hablamos. Tan solo un suave test de una docena de vueltas te deja con el cuello tocado, los antebrazos echando chispas y la espalda remachada de moratones... — Contorsionismo. Para acomodarnos usamos un asiento que era de espuma casi tan fina como el papel de fumar, para entrar hay que retirar una pieza a modo de hombreras y luego apenas hay sitio, tan sólo se pueden mover los brazos y poco más. Y eso que los mecánicos nos apuntaron que este es más cómodo que el F306, algo más estrecho.— El cuadro de mandos. Está en el volante. Allí, una pantalla digital multifunción nos ofrece toda la información que podemos necesitar. La hay sencilla, para ver el cuantavueltas, la marcha en la que pilotamos y poco más, pero se puede elegir entre varias pantallas diferentes. Lleva incorporada la adquisición de datos, de modo que la información que proporcionan infinidad de sensores dispuestos en el coche es la que luego emplean los ingenieros para "leer" el trazado con el piloto. Recorridos de suspensión, temperaturas, presión, velocidad, etc. — Arrancar es sencillo. Es suficiente conectar la corriente, que nos suministran los mecánicos desde fuera, porque la batería de a bordo es muy pequeña, solo para emergencias, y pulsar un botón para arrancar el motor. El piloto dispone también a bordo del regulador de frenada. — El motor: el secreto del éxito de este certamen desde 1999 es que emplea el mismo motor, y su rendimiento y fiabilidad son excelentes. Los costos de un motor libre para F3, como ocurre en otros campeonatos, duplican el presupuesto necesario para la temporada. Y hablamos ya de más de 250.000 euros. La culpa de este éxito es de Julián Piedrafita, que por encargo de Jesús Pareja (GT Sport, organizador del certamen) prepara y precinta los motores de la F3 española para todos por igual. Cada equipo o piloto debe comprar el motor, que vienen a costar 40.000 euros, y este se entrega listo para correr con una vida útil de trece horas a más de 4.000 rpm. Son muchas horas a ritmo de carrera y da de sobra para completar la temporada. Tanto es así, que hay muchos equipos que llevan dos y hasta tres temporadas sin mandar a revisión sus motores -los motores más rodados corren más-, algo absolutamente impensable en otras categorías. — En el banco de datos. El hiperutilizado motor ha dado recientemente en el banco 206,4 CV a 7.250 rpm para una velocidad de 226,5 km/h. La velocidad es variable y los datos son de potencia a la rueda.
| Marca y modelo: | Dallara-Fiat F3 |
| Carrocería | Monocasco de fibra de carbono, kevlar y nido de abeja. Alerón anterior y posterior regulable, extractor trasero y pontones laterales en fibra de carbono. Fondo plano de madera. |
| Dimensiones exteriores | 4,188/1,825/0,950 m |
| Batalla-Vías | 2,710 m 1,580-1,465 m |
| Peso | 565 kilos, incluido piloto y lastre |
| Motor | 4 cilindros en línea. Cárter seco. 2.000 cc. 86 x 86 mm |
| Distribución | Distribución |
| Alimentación | Inyección electrónica Magnetti Marelli |
| Potencia máxima | 210 CV a 7.150 rpm |
| Par máximo | 22,6 mkg a 6.100 rpm |
| Tracción | A las ruedas traseras con autoblocante de tipo ZF, de discos, tarado 30/45 en aceleración y 45/60 en retención. |
| Cambio | Hewland secuencial de seis velocidades y marcha atrás. |
| Embrague | Embrague |
| Suspensión delantera | De doble triángulo superpuesto push-rod con monoamortiguador Koni regulable en compresión y extensión, muelle Eibach y estabilizadora. |
| Suspensión trasera | Doble triángulo push-rod con doble amortiguador, muelle y estabilizadora. |
| Frenos delanteros | Disco ventilados con pinzas Brembo de 4 pistones y regulador de frenada. |
| Frenos traseros | Disco ventilados con pinzas Brembo de 4 pistones. |
| Dirección | Cremallera |
| Llantas | Oz de aluminio en 9x13 delante y 10,5x13 detrás. |
| Neumáticos | Dunlop 180/550 y 250/570 |
| Depósito | De seguridad de 100 litros |
| Precio | 130.000 euros |
— Prueba al límite
— Una vuelta al Jarama
