Lo mejor
Daniel Ricciardo. El australiano volvió a sorprender a todos. Bien es cierto que, de no haber tenido los problemas los Mercedes, seguramente no hubiese ganado su primera carrera en Montreal. Pero Ricciardo supo arreglárselas para adelantar a los dos Williams, que salían por delante de él en parrilla, a su compañero de equipo en la segunda parada en boxes y a Sergio Pérez en una gran maniobra a pocas vueltas del final. Con Rosberg delante, con problemas en el MGU-K y en los frenos traseros, no opuso resistencia ante el piloto de Red Bull, que deshizo inesperadamente el monopolio de victorias de Mercedes en lo que llevábamos de temporada.
Nico Rosberg. Si bien no ganó la carrera cuando era líder a falta de dos vueltas, el piloto alemán sacó la calculadora cuando tenía problemas mecánicos y no arriesgó los 18 puntos del segundo puesto. Con su gran enemigo por el campeonato Lewis Hamilton fuera de batalla, Rosberg sabía que un segundo puesto le afianzaría todavía más en el liderato, por lo que evitó tomar riesgos innecesarios. Eso sí, suya fue una de las maniobras feas de la carrera, al saltarse la ‘chicane’ de entrada a meta y no ceder el tiempo que ganó cuando luchaba con Hamilton. Sólo recibió una advertencia por parte de los comisarios.
Emoción. En una temporada que está presumiendo de ser bastante aburrida, hay que destacar las carreras que nos están dejando más emoción. Así fue el GP de Bahrein en abril, y así fue el de Canadá este pasado fin de semana. Curiosamente, dos circuitos con largas rectas, de altas velocidades puntas y donde la buena tracción a la salida de las curvas lentas es vital. En Montreal, volvimos a ver un cara a cara entre los dos Mercedes, hasta el abandono de Hamilton, con invitados inesperados: los Red Bull, el Force India de ‘Checo’ Pérez y los Williams.
Lo peor
Accidente Massa-Pérez. La última vuelta del GP nos dejó una de las imágenes más escalofriantes de los últimos años en la F1. Felipe Massa, que venía remontando tiempo tras su última parada en boxes, chocaba a 300 km/h contra la rueda trasera izquierda de Sergio Pérez cuando luchaban por el cuarto puesto. Los dos salían despedidos por la recta principal y chocaban violentamente contra las protecciones, librándose además el brasileño de llevarse por delante a Vettel, lo que habría sido seguramente una tragedia. Las protecciones frenaron a ambos violentamente, pero pudieron salir del coche sin ningún daño aparente. Cuando todo el mundo apuntaba a Massa como el culpable del accidente, los comisarios castigaron al piloto mexicano con cinco puestos de penalización para la próxima carrera.
Ferrari. En todas las peleas por el pódium y por la victoria aparecen varios equipos… y ninguno de ellos era uno de los monoplazas rojos. Era de prever que, tras 9º y 10º en Bahrein, un circuito de características similares al de Montreal, el F14-T iba a sufrir más de la cuenta. El trazado canadiense requiere la mejor capacidad de tracción de los monoplazas y motores potentes para afrontar sus largas rectas, y ahí el coche italiano ‘cojea’. Incapaces de adelantar a los Force India, los Williams e incluso a los Toro Rosso en condiciones normales en carrera, Alonso sólo pudo ser 6º en Canadá y Räikkönen 10º, gracias a los abandonos finales de Pérez y Massa.
Fernando Alonso (6º)
El piloto español tuvo que luchar durante toda la carrera por debajo del 5º puesto. Tras salir 7º, perdió una posición con el Toro Rosso de Vergne, y tuvo que esperar a la primera parada en boxes para adelantarle. Después, peleó con los Williams por no ser adelantado –aunque no pudo aguantarles finalmente– y con el Force India de Hulkenberg. La mayor velocidad punta de los monoplazas motorizados por Mercedes impidió a Alonso quedar más arriba, y se tuvo que conformar con ser 6º a pesar de ser adelantado en la última vuelta por el alemán y por Jenson Button.
- Nuestra nota: 7.