Uno de los objetivos de la FIA para realizar estos cambios de formato, era que hubiera más coches en pista y otro, una mayor igualdad entre los pilotos y escuderías. Y desde luego ninguno de los dos se ha cumplido. A falta de 4 minutos para que finalizara la Q3, ni Hamilton ni Rosberg volvieron a salir a rodar, mientras que el resto iba siendo eliminado, no mientras rodaban en pista, sino en el box, ya fuera de sus monoplazas. Lo mismo ocurrió durante la Q2. La igualdad tampoco se ha visto en ningún momento, ya que ha favorecido claramente a Mercedes, parece “hecho a su medida” este nuevo formato de calificación.
En el paddock de la F1 no se oyó ni una sola voz que dijera que estaba de acuerdo con este nuevo formato de calificación. Sólo Hamilton parece que no estaba tan descontento con ella, y al haber marcado la pole con esa facilidad, es lógico que no sea crítico. “Creo que habría que cambiar sólo algo de la calificación”, comentó Hamilton al bajarse del coche. Pero es el único al que se le ha oído que le gusta este nuevo formato, aunque está claro que los pilotos todavía no tienen noción de lo que ha pasado. Habrá que esperar un tiempo y ver si cambia de opinión. Vettel fue el más crítico de los tres primeros calificados, y dijo que: “No sé por qué la gente se ha sorprendido por este sistema, yo lo tenía bastante claro. Es un anticlimax”.
Dando un paseo por el paddock, el mismo Helmut Marko (Red Bull) lo definió como “basura”, y que hacía falta una reunión urgente con la FIA para volver al formato anterior. Niki Lauda también dijo que era un “error, una decisión incorrecta”.
Este nuevo sistema está claro que beneficia a los grandes, y en circuitos largos, como el de Spa, las diferencias serían extraordinarias si continúa siendo así la calificación. Está claro que favorece al más rápido, al que puede planificar su sesión con antelación. Este sistema sería efectivo si las diferencias entre los pilotos fueran menores, pero con este abismo entre Mercedes y el resto, es imposible que funcione.
Urge que tanto los equipos como la FIA se reúnan, y para el GP de Baréin que se disputará dentro de dos semanas, todo vuelva a ser como el año pasado, una calificación como había sido hasta ahora, y que desde luego había mucha más actividad en la pista y daba más igualdad. Funcionaba ese sistema en el formato de un Gran Premio, ¿por qué cambiarlo?