El Ford Mustang de sexta generación es ya una realidad. Su andadura comercial comenzará durante el próximo otoño en Estados Unidos y habrá que esperar a 2015 para verlo circular por las carreteras europeas.
El nuevo Ford Mustang inicialmente disponible en Estados Unidos incorporará dos motores de gasolina: el turboalimentado EcoBoost 2.3 de 310 CV y el atmosférico 5.0 V8 de 435 CV. Estos mismos propulsores también se podrán elegir en Europa, aunque por el momento la firma del óvalo no ha detallado las especificaciones concretas para nuestro mercado.
Motor 2.3 EcoBoost
Inyección directa de combustible, cuatro cilindros en línea y sobrealimentación mediante turbocompresor, éstas son algunas características destacadas del nuevo motor de gasolina 2.3 EcoBoost que incorporará el Ford Mustang. Se anuncia una potencia máxima de 310 CV, mientras que el par máximo declarado es de 44,23 mkg.
Este propulsor EcoBoost también cuenta con tecnología de doble distribución variable independiente. Dentro de sus entrañas, destaca el cigüeñal de acero, los chorros de enfriamiento para pistones, las cabezas de pistón de acero, materiales de calidad para los cojinetes, bielas de acero forjado, el bloque de cilindros en aluminio fundido a alta presión y el depósito de aceite profundo en aluminio fundido a presión.
A falta de confirmación oficial de prestaciones y consumos, Ford asegura que el Mustang EcoBoost asegurará unos más que notables registros de eficiencia.
5.0 V8 atmosférico
El motor 'gordo' en la nueva andadura del Ford Mustang corresponde a un bloque de gasolina 5.0 V8 atmosférico, con una potencia de 435 CV y un par máximo de 55,3 mkg. Esta mecánica incorpora una serie de cambios con el objetivo principal de asegurar el rendimiento óptimo con la máxima eficiencia.
Rejillas de admisión y válvulas de escape más grandes, levas de admisión reguladas, nuevos árboles de levas, muelle de válvulas más rígido, nuevo molde de la culata, modificaciones en la cámara de combustión, bielas forjadas más ligeras y resistentes a altas revoluciones, cabezas de pistón rediseñadas y un cigüeñal forjada recalibrados son algunos de los elementos a destacar en el ADN del nuevo motor 5.0 V8 atmosférico del Ford Mustang.
Chasis
El nuevo Ford Mustang ofrecerá un esquema de suspensiones delantera y trasera independientes y una estructura de carrocería más ligera y mejorada, gracias a la utilización de nuevos componentes en acero y aluminio de alta resistencia.
El peso mínimo en vacío del Mustang 5.0 V8 con cambio automático es de 1.691 kg, mientras que para el 2.3 EcoBoost también con cambio automático es de 1.598 kg. En cuanto a reparto de pesos, para la versión 2.3 se anuncia un 52 por ciento de peso para el tren delantero y un 48 por ciento para el trasero, mientras que en la variante V8 la proporción es de 53/47.
La suspensión trasera independiente del Mustang cuenta con nueva arquitectura, con un brazo de control más bajo, geometría, ballestas y bujes modificados y una barra estabilizadora de mayor diámetro. En la parte delantera, un subchasis auxiliar refuerza la estructura al mismo tiempo que reduce la masa.
En un vehículo del porte del Ford Mustang, el sistema de frenado es uno de los elementos técnicos que especialmente se cuida. En este caso (en este apartado, las especificaciones son válidas para Estados Unidos y Europa), la variante 2.3 EcoBoost incorporará unos frenos de disco ventilados de 352 mm delante y 330 mm detrás, con cuatro pistones y pinzas de 46/45 (delante/detrás). Por su parte, la versión 5.0 V8 llevará discos ventilados de 380 mm delante y 330 mm detrás, seis pistones, pinzas Brembo de 36 mm delante y pinzas de 45 mm detrás.
(*) En unos meses, se darán a conocer las especificaciones para el mercado europeo.
