"Entre las distintas opciones de coches nuevos que me gustan, visito los distintos configuradores de coches nuevos que tienen las marcas y siempre me salen packs con llantas de aleación y tamaños de neumáticos de lo más variopintos. Mis amigos me dicen que un coche con ruedas grandes y bonitas llantas de aleación luce más, es como más coche, pero realmente creo que detrás de todo este asunto hay más por saber. Lo más inmediato que se me ocurre es lo siguiente: ¿es bueno o malo comprar un coche con las ruedas grandes? ¿qué hay que tener en cuenta?
Respuesta de nuestro experto técnico Luis Miguel Vitoria
En estos tiempos, todos los fabricantes de coches rellenan con múltiples opciones el equipamiento de sus modelos. Una de las más habituales es la posibilidad de incorporar llantas de mayor diámetro calzadas con neumáticos más anchos y de perfil más bajo. En cuanto se ve el efecto estético, muchos compradores deciden instalar las de mayores dimensiones, porque «molan» un montón.
Sin embargo, debemos pensar un poco antes de tomar esa decisión. En primer lugar, no sólo se debe mirar el precio de la propia opción —muy ajustada porque se descuenta el coste de la dotación de serie— sino el de los neumáticos, cuando haya que cambiarlos, pues entonces podemos encontrarnos con una desagradable sorpresa. Al principio, tu coche luce muy bien, pero debes tener en cuenta que tendrás que cambiarlos con el tiempo y el desgaste que sufran. En este caso, el tamaño sí que importa, porque unos neumáticos más grandes son siempre más caros, por lo que el coste de mantenimiento de tu coche se verá incrementado.
Otro tema a priori que se debe tener en cuenta a la hora de elegir o no unos neumáticos grandes afectan al día y, concretamente, a dos cuestiones importantes como son el ahorro de combustible mientras conduces y las condiciones de seguridad. En el caso primero, el del gasto de combustible, debes saber que unos neumáticos más grandes generan mayor rozamiento al avance, por lo que el consumo sube respecto a unos de menor tamaño. En el caso de seguridad y con muchísima lluvia y, por tanto, con más posibilidades de que se formen grandes charcos en la calzada, unos neumáticos de generoso tamaño son también más propensos al aquaplaning.
Sea cual sea la decisión que tomes, un consejo que no nos cansamos de repetir: mantenimiento y control del estado de los neumáticos y una conducción responsable.
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